La entidad anticapitalista de Manacor Caterva ‘multó’ con 300 euros a un centenar de vehículos -«la mayoría de alquiler»- por aparcar en el camino que conduce a Cala Varques. Una acción simbólica con la que la agrupación local quiso poner de manifiesto la saturación turística que sufre la isla y esta zona costera en particular.
«Queríamos hacer partícipe al turista y que fuese conocedor del malestar de los mallorquines», asegura la asociación en una nota, en la que detalla que las sanciones buscan denunciar el «monocultivo turístico con un toque de humor y sátira». De este modo, continúan en el citado comunicado, se ‘multa’ al visitante con 300 euros por «contribuir a la destrucción de Mallorca».
La entidad explica que la sanción, colocada estratégicamente en los parabrisas de los vehículos, incluye un código QR que dirige directamente a una web que emula un ataque informático y, entre otros, borra todas las fotografías de Mallorca colgadas en Instagram. Al final del periplo, aparece el manifiesto de Caterva. «La web se puede encontrar en https://hacktheguiri.netlify.app y tiene versión en catalán, inglés y alemán», subraya la entidad, haciendo énfasis en la diversidad de idiomas.
Una acción simbólica en la que Caterva quiso demostrar la «facilidad» con la que podría gestionarse el problema que acecha el acceso a Cala Varques, cada estío colapsado de vehículos. Según señaló la agrupación, durante el tiempo que transcurrió la acción se informó a los turistas de que en esa zona no se podía estacionar y se les «trasladó el malestar [de la población] respecto a esta problemática» y algunos de ellos se fueron.
«Es por eso que si tanto el Ayuntamiento de Manacor como el Consell de Mallorca tuvieran intención real de arreglar la saturación de las calas vírgenes de Manacor sería muy sencillo. Y sin poner ninguna multa», arguyen.
«El problema es el sistema»
«El problema no es el turista individual, sino un sistema fomentado y sustentado por las clases dirigentes de la isla que se enriquecen a expensas de la clase trabajadora y del territorio», esgrime Caterva, que critica el posicionamiento del Partido Popular al, dicen, denunciar «los excesos del turismo de masas, culpabilizando al turista de clase baja y defendiendo un turismo de lujo». Un error, en palabras de la entidad, ya que dicho modelo «seguirá conduciendo al pueblo de Mallorca y su tierra hacia la destrucción».