El exministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha dirigido una serie de preguntas al Gobierno sobre lo que considera “un posible rastreo sin aval judicial” por parte de la Policía y sin tener en cuenta su condición de aforado. Concretamente, el diputado expulsado del grupo socialista por su responsabilidad política en el caso Koldo, aduce “revelación de secretos” por los correos filtrados de la presunta trama investigada.
En el documento dirigido al Gobierno para su respuesta apunta al aumento de publicaciones de “datos y detalles de mi ámbito personal” a raíz de la “remisión” por parte de la Guardia Civil de documentos que forman parte de “una instrucción judicial que no es pública” y que no estarían relacionados con ella.
Ábalos pregunta al Gobierno si tiene conocimiento de la existencia de algún tipo de investigación a su persona a o familiares desde enero de 2020 hasta la fecha o de consultas en las bases de datos a las que pueden acceder las fuerzas y cuerpos de seguridad sobre sus datos personales, desplazamientos, control de hospedería, Registro de la Propiedad, Catastro o DGT. En este caso, demanda una auditoría de todos los datos consultados y la identificación de los autores.
En referencia directa al ‘caso Delorme’, el exministro cuestiona que la Guardia Civil haya remitido “36 horas antes de que la Fiscalía Europea reclamase la competencia” del caso, la correspondencia incautada a Koldo García” que afecta a otras personas que no están siendo investigadas. “En mi caso son documentos relativos a mi actividad política y a mi vida privada sin tener relación con el objeto de la investigación del caso”, según defiende. Su difusión, según concluye, “están sirviendo en una campaña de acoso mediático sobre mi persona por los mismos medios que publica dicha correspondencia”.