En el pleno municipal del pasado mes de febrero, se aprobó una moción institucional presentada por el PSOE y respaldada por todos los partidos que componen el consistorio, en contra de la instalación del parque fotovoltaico de Can Garriga.
Recientemente, los vecinos han presentado un documento de 20 páginas con un total de 11 alegaciones en contra de esta instalación. Estas alegaciones detallan diversas preocupaciones y objeciones, algunas de las cuales, según la plataforma vecinal, indican que el proyecto incumple varias leyes y normativas aplicables a este tipo de instalaciones.
El principal argumento de los vecinos se centra en el impacto medioambiental y paisajístico que supondría la instalación del parque fotovoltaico en una zona rural de gran valor. Además, señalan que la ubicación propuesta podría afectar negativamente a la biodiversidad local y a las actividades agrícolas tradicionales de la región. La oposición al proyecto subraya la importancia de equilibrar la necesidad de energías renovables con la protección del entorno natural y los intereses de las comunidades afectadas. Esta situación en Can Garriga refleja un desafío común en muchas localidades.