Moscú busca poner más vallas al ya limitado internet del país y la última víctima es el popular portal de vídeos estadounidense YouTube. Según anunció este viernes la compañía de propiedad estatal Rostelcom de telecomunicaciones, se debe a «problemas técnicos». Sin embargo, medios independientes rusos citan a trabajadores de empresas del sector, que apuntan que el Gobierno está ralentizando deliberadamente YouTube en el país desde el pasado jueves.

Fuente