La amenaza se ha cumpliado este jueves por la noche. Santiago Abascal anunciaba tras cerca de tres horas de reunión con sus vicepresidentes autonómicos que Vox sale de los gobiernos regionales de los que forma parte y rompe la coalición en cinco territorios, entre ellos la Región de Murcia. Esto deja el Gobierno del popular de Fernando López Miras en minoría.
Diez meses es lo que ha durado la coalición de PP y Vox en la Comunidad Autónoma, desde que se firmara en septiembre de 2023 el acuerdo en Cartagena entre Joaquín Segado y Rubén Martínez Alpañez, portavoces de ambos partidos.
La gestión del reparto de los menores migrantes llegados a Canarias entre las comunidades autónomas ha sido el detonante. La formación liderada por Abascal ha ido lanzando avisos en los últimos días, pero la advertencia no se ha materializado hasta este jueves, 24 horas después de firmarse el acuerdo entre las comunidades autónomas y el Gobierno central para la acogida de estos menores extranjeros, de los que 16 vendrán a la Región de Murcia, tal y como se acordó en 2022.
El líder de Vox ha motivado esta decisión en «la agresión» del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, al «obligar» a las comunidades a aceptar el reparto menores migrantes no acompañados.
De esta forma anunciaba este jueves por la noche Abascal que su partido se retira de los gobiernos de la Región de Murcia, Castilla y León, Aragón, Comunidad Valenciana y Extremadura con la dimisión de sus vicepresidentes, para pasar a ser en estas comunidades una oposición «leal y contundente», rompiendo también el pacto de investidura en Baleares.
Durante una comparecencia en la que no admitió preguntas dijo que «es imposible pactar con el que no quiere hacerlo», al tiempo que acusó a Feijóo de pretender «imponer políticas de fronteras abiertas». De esta forma también advirtió de que «nadie ha votado» a Vox ni al PP para que se mantenga la «invasión» de emigración ilegal y de menores no acompañados en España.
Santiago Abascal llegó a decir, flanqueado por el todavía vicepresidente y consejero de Interior, Emergencias y Ordenación del Territorio de la Región de Murcia, José Ángel Antelo, que «hemos cedido en ocasiones demasiado, pero es imposible pactar con el que no quiere hacerlo y quiere imponer unas políticas de fronteras abiertas».
Así, sentenció que los acuerdos regionales «están rotos» y anunció que el Comité Ejecutivo Nacional había acordado retirar el apoyo a las cinco comunidades autónomas en las que forman parte de sus gobiernos, entre ellas Murcia. Por ello, dijo que los vicepresidentes anunciarán su dimisión y «pasarán a la oposición».
En este caso, el Gobierno regional perdería al vicepresidente y consejero, José Ángel Antelo, y al responsable también de Fomento e Infraestructuras, José Manuel Pancorbo.
Tras diez meses de Gobierno de coalición, el PP se verá de nuevo solo en San Esteban y esta opción, la de un gobierno en minoría, es la que tiene ahora mismo más fuerza, teniendo en cuenta que la pérdida de los apoyos de Vox solo le restaría dos escaños y el ejercicio 2024 está rodado, con unos presupuestos ya aprobados y funcionando.
El Partido Popular quedó en las últimas elecciones autonómicas de mayo de 2023 a falta solo de dos diputados para conseguir la mayoría absoluta (23 diputados) en la Asamblea Regional, por lo que se hizo necesario el apoyo de Vox y su entrada en el Gobierno autonómico, con un vicepresidente y otro consejero.
El Gobierno en minoría le supondría al PP tener que ir sacando sus propuestas adelante con apoyos puntuales en cada caso, aunque no lo tendría muy complicado teniendo en cuenta que no se entendería una postura opuesta totalmente de Vox en la oposición. Sería muy complicado justificar que la formación de Abascal hiciera piña con los grupos de PSOE y Podemos.
Pero no hay que perder de vista que a la vuelta del verano hay que comenzar a trabajar en el Presupuesto de 2025, que se debe aprobar a final de año, unas cuentas necesarias ya que la opción de prorrogar las actuales no está sobre la mesa con el déficit que se arrastra.
Otra alternativa para López Miras tras una hipotética ruptura con Vox sería la convocatoria de elecciones, una vez que ya ha pasado un año desde las anteriores. Esta baza podría ser favorable para el actual presidente, teniendo en cuenta que todas las encuestas le presentan todavía más fuerte que en los anteriores comicios.