“Es una decisión injustificada e incomprensible enmarcada en la estrategia nacional de Vox, que ha antepuesto sus intereses electorales a los de los castellanos y leoneses”, comienza el comunicado del Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco lanzado esta noche tras la decisión de Vox de romper los pactos en sus ejecutivos autonómicos, entre ellos el de Castilla y León, cumpliendo el órdago lanzado en los últimos días por el vicepresidente Juan García-Gallardo que secundaba el de su jefe de filas, Santiago Abascal.
El Gobierno de Mañueco recuerda que la posición respecto al acogimiento de los menores extranjeros no acompañados ha sido la misma desde 2021 y que ni en 2022 ni en 2023 Vox ha dicho nada al respecto, encontrándose, igual que hasta ahora, en el seno del Consejo de Gobierno autonómico.
Mañueco insiste en que “es evidente que se ha cumplido el pacto de gobierno”, contra la visión defendida por Gallardo, que ayer mismo hablaba de deslealtades con respecto al punto 32, que hablaba de promover “una inmigración ordenada que, desde la integración cultural, económica y social, y en contra de las mafias ilegales, contribuya al futuro de Castilla y León”.
Mañueco, en minoría
El presidente, que queda así gobernando en minoría al albur del apoyo del PSOE que el líder socialista Luis Tudanca le ha propuesto en diversas ocasiones durante las últimas semanas, “tendiendo la mano” para que rompiera el pacto con los ultraderechistas, garantiza, no obstante, “la estabilidad” del Ejecutivo.
Tudanca: “Una gran noticia”
El secretario general socialista, cuya comparecencia se sumará mañana a las de Juan García-Gallardo y el propio Mañueco, para valorar la situación en la que queda la política autonómica, ha lamentado esta noche en su cuenta de X-Twitter la debilidad en la que, a su juicio, queda el presidente a partir de este momento.
“La salida de la extrema derecha de los gobiernos es una gran noticia”, ha dicho, aunque añade que “a diferencia del resto de Europa, la sacan intereses electorales y competencia entre las derechas, no los principios de un PP que aún suplicaba que se quedaran. Mañueco queda débil y genera inestabilidad. De nuevo”.
Por su parte, el siempre irónico Francisco Igea ha comentado, también en su cuenta en la red social: “A propósito de la honra y los barcos alguien debe de estar jugando a ‘salvad a la flota’”, en referencia a la frase de Gallardo de los últimos días: “Si tenemos que elegir entre barcos y honor, elegimos honor”.
