La visita que el Tour de Francia ha efectuado este miércoles al Macizo Central, con seis puertos por el camino y 211 kilómetros, la segunda más larga de la presente edición, ha deparado una etapa magnífica en la que Jonas Vingegaard le ha demostrado a Tadej Pogacar con su victoria al esprint que sigue muy vivo en la general. El astro esloveno mantiene la primera plaza pero el doble vencendor de la prueba los dos últimos años se le acerca poco a poco con Remco Evenepoel, segundo de la clasificación.
Así que con Tadej Pogacar al frente de la general, el Tour sigue bajando hacia el sur del país para buscar los Pirineos este fin de semana de intensa pelea por la general. Así, este jueves la 12ª etapa enlazará la localidad de Aurillac, que recuerda una victoria en solitario de Luis León Sánchez en 2008, con la de Villeneuve sur Lot después de 203,6 kilómetros.
La jornada, aunque parezca llana, tiene más dificultad que etapas precedentes que acabaron al esprint por lo que este jueves no sería descartable que se produjera una escapada que, si adquiere minutos, pueda llegar triunfante a la línea de meta. Solo hay tres cotas de cuarta categoría pero el terreno no es tan fácil como da la sensación porque esconde un desnivel positivo de 2.200 metros. El martes, en la victoria de Jasper Philipsen con el peloton compacto sólo se superaron 990 metros de subida en total.