Una insólita secuencia tuvo lugar en la madrugada del sábado en la zona sur de la ciudad de Córdoba. Allí, un conductor no pasó el test de alcoholemia y sufrió el secuestro de su auto. Minutos más tarde, el hombre ingresó al corralón y se llevó su vehículo. Al día siguiente, pagó la multa y fue denunciado.
El hecho tuvo lugar en un control policial sobre avenida Cruz Roja, en intersección con avenida Belardinelli. En ese punto, inspectores se llevaron la sorpresa de que el hombre llevaba 2,37 gramos de alcohol en sangre.
CÓRDOBA: LE QUITARON EL AUTO Y LO “ROBÓ” DE UN CORRALÓN
Cuando constataron el estado de ebriedad del hombre, procedieron al secuestro del auto, que fue llevado a un corralón ubicado a pocos metros del control, sobre la calle Lisandro Novillo Saravia. Pasado unos minutos del hecho, el conductor caminó hasta el lugar, pasó la seguridad del establecimiento y se dirigió a su coche, un Audi A3.
Se subió al auto y se fue del lugar, como si nada hubiese ocurrido. De acuerdo a Perfil, la facilidad del “robo” se debe había gran movimiento en la zona y que quien inspecciona los ingresos, también se encarga del registro y ubicación de los vehículos en la playa.
Al ver que faltaba el auto, el guardia radicó la denuncia en la Unidad Judicial N° 4. Sin embargo, esa misma mañana del sábado, el infractor se presentó en Tribunales Administrativos Municipales de Faltas para pagar la multa. Le quitaron el auto de nuevo y fue denunciado por hurto. En el caso interviene la Fiscalía de Instrucción Distrito 1 Turno 4.