Un hombre ha sido condenado a un año y nueve meses de cárcel por agresión y por incumplir, de forma reiterada, una orden de alejamiento de su expareja, con la que seguía conviviendo con ella en un hostal.
Además, le ha impuesto la prohibición de aproximarse y comunicarse con la víctima durante tres años, así como el pago de una indemnización de 10.000 euros, según una sentencia de la sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña.
La resolución del 4 de julio, divulgada este lunes por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, señala que hay prueba de cargo «unívoca, plural y suficiente» de las agresiones sufridas por la mujer.
Un testigo residente en el edificio que llamó a la Policía y los agentes que se desplazaron al lugar manifestaron que el portal tenía los cristales rotos y la víctima presentaba signos visibles de haber sido agredida físicamente.
Según la sentencia, que no es firme, pues cabe interponer recurso de apelación, la mujer tenía lesiones en brazos, piernas, cuello, espalda y cabeza, tal y como consta en los partes médicos.