El juzgado Togado Militar Central 2 de Madrid que instruye la causa de los dos militares fallecidos en la base de Cerro Muriano ha citado como investigado al sargento que instaló la cuerda guía para el cruce del lago artificial de 110 metros que se usó en la maniobra en la que murieron el cabo Miguel Ángel Jiménez y el soldado Carlos León el pasado mes de diciembre.
Así se desprende del auto del juez dado a conocer este lunes. Esta nueva imputación, a petición de las acusaciones particulares ejercidas por los padres y la viuda del cabo Jiménez, Francisco José Pérez y Antonio Granados, respectivamente, supone un cambio en la situación del sargento, el segundo citado como investigado ahora en el caso, que declaró como testigo el pasado 27 de junio. Tras este cambio, que anula la declaración que hizo el sargento en calidad de testigo, según ha informado la defensa de la viuda del cabo, Antonio Granados, el ahora citado como investigado tendrá que volver a declarar ante el juez el próximo 18 de julio.
Dos nuevos testigos
Además, en este nuevo auto, y según las fuentes consultadas, el juez ha citado a declarar a dos nuevos testigos (un teniente coronel y un capitán) que hicieron ejercicios similares en la base de Cerro Muriano. Estas declaraciones tendrán lugar entre el 16 y el 18 de julio en la sede del Tribunal Militar Central.
Tras este cambio, se elevan a ocho los investigados por la causa, que son un capitán, dos sargentos, un teniente, dos coroneles, un teniente coronel y un comandante de la Brigada Guzmán El Bueno X.
El primer sargento no tendrá que declarar
El teniente coronel y el capitán llamados a declarar ahora ya mostraron su versión ante el juzgado Togado Militar Territorial 21 de Sevilla, pero en su nueva citación tendrán que hacerlo en la sede judicial de Madrid. Quien no ha sido citado ha sido el sargento que declaró junto a ellos en el juzgado sevillano.
La defensa de la viuda del cabo Jiménez ha informado a este periódico que no va a presentar acusación contra el primer sargento investigado, al considerar que «más que un verdugo fue una víctima» del incidente.
Hay que recordar que este caso, en un primer momento, estaba siendo investigado por el juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba, que posteriormente lo derivó al juzgado Togado Militar Territorial 21 de Sevilla que, al mismo tiempo, se inhibió en favor del juzgado Togado Militar Central 2 al considerar que podrían existir responsabilidades penales por parte de militares aforados.
