El presidente del Gobierno y líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, ha asegurado este sábado en Bucarest, durante un encuentro del Comité de Europa de la Internacional Socialista, que los partidos de esta formación son la «última línea de defensa» ante la ultraderecha, y que el antídoto ante su avance es gobernar y atender los problemas de la gente.
En un discurso en inglés, que fue retransmitido parcialmente en directo por redes sociales, Sánchez dijo que «no hay mejor antídoto contra el populismo reaccionario que un Gobierno que se ocupe de los problemas reales de nuestro pueblo. Esta es, creo, la manera de combatir la frustración y la ira de las que se alimenta (la extrema derecha)».