Hay concursantes que animan al público nada más salir al escenario y Valeria Ros es una de ellas. La cómica ha asumido uno de los papeles más complicados y necesarios de Tu cara me suena 11: el de hacernos reír con tan solo mirarla.

Valeria ha recordado su estreno en Tu cara me suena 11 con Britney Spears, a quien cogió con muchas ganas. La concursante se convirtió en una auténtica colegiala y sentó precedente de lo que sería el resto de su paso por el programa… ¡un auténtico show!

Siguiendo con divas del pop, la cómica también se ha metido en la piel de Paulina Rubio. Con su electricidad y su energía, Valeria ha asegurado que el mayor reto de imitar a la mejicana fue no ahogarse, aunque no lo tuvo fácil.

De grandes estrellas de la industria, pasamos a… ¡ositos de gominola! Valeria se convirtió en Gummibär, ataviada con un disfraz con el que estaba irreconocible. Aunque se divirtió mucho, todavía recuerda el calor que pasó ahí dentro.

Pero si hay una actuación por la que recordaremos a Valeria es por su ‘Pedro’ y la gran Raffaella Carrà. La concursante ha logrado que un mapache se convierta en el estandarte del programa e incluso tenga el poder de paralizarlo cuando le venga en gana. ¡Ni el presidente tiene tanto poder!

Con sus frenéticas actuaciones, Valeria ha demostrado que es el ejemplo de la ilusión y la energía. Su descarada actitud nos ha hecho llorar de la risa, pero también ha trabajado muy duro para lograrlo. “He aprendido a tener miedo otra vez”, ha admitido la concursante, que cada vez teme más al pulsador.

Pese a los difíciles retos que le ponen cada semana, Valeria ha conseguido superarlos con creces. Incluso cuando le tocó Verka Serduchka y su incansable coreografía, la cómica no dejó que le sobrepasase.

Alegría, ganas y muchas risas es todo lo que nos ha regalado Valeria Ros desde el inicio de su concurso, pero nos queda mucho más por ver de ella. ¡Dale al play para ver sus mejores momentos en el video de arriba!

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