Cuando se conoció la última absolución de Francisco Camps en el caso Gürtel, tanto los diputados en las Corts como el propio líder del PPCV, el president de la Generalitat, Carlos Mazón, se lanzaron a defenderle y reivindicar el «acoso judicial» vivido durante 15 años, sin embargo, cualquier homenaje se quedó ahí, en las palabras. Este jueves las palabras se han convertido en brindis, abrazos y cena frente al mar, aunque no del PP oficial, sino por parte de antiguos compañeros de batallas en gobiernos autonómicos y municipales.

Fuente