Con apenas 16 años, Lamine Yamal se está confirmando en la Eurocopa como la sensación emergente del fútbol europeo, dando continuidad como referente de la selección española a todo lo que ha exhibido al completar como titular su temporada de estreno en el primer equipo del Barça, club que tiene muy claro la condición de “intocable” de su niño prodigio. Tanto es así que, según pudo saber MD, al club azulgrana ya ha llegado que el PSG estaría dispuesto a poner 250 millones de euros para intentar fichar a Lamine. Para el Barça, sin embargo, no hay negociación posible: Lamine no está en venta bajo ningún concepto.
En marzo pasado, el presidente azulgrana Joan Laporta desveló en una entrevista para Barça One que el Barça ya había “rechazado una oferta por Lamine de 200 millones de euros”. Este diario pudo saber por aquellas fechas que el club que había hecho llegar esa mareante oferta era el PSG, el mismo que ahora está dispuesto a subir su órdago en 50 millones más, hasta alcanzar los 250. Ese listón habla claramente de la consideración que el mercado otorga a la gran aparición de Lamine, en quien el PSG ve al delfín ideal para iniciar la era post Kylian Mbappé, que ha fichado por el Real Madrid.
Desde 2017, el PSG aún ostenta el récord histórico de inversión en un fichaje, precisamente al llevarse del Barça al brasileño Neymar pagando la cláusula de rescisión de contrato, cifrada en 222 millones. Siete años después, está por la labor de batir su propio récord con Lamine, pero su problema es que el Barça tiene la sartén por el mango. Para empezar, el extremo tiene una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros tras la última renovación de contrato que rubricó en octubre y que le une al club culé inicialmente hasta 2026 porque al ser menor de edad no podía firmar más allá de tres temporadas, pero ya lo hizo con el compromiso adquirido de alargar ese vínculo hasta 2031.
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Además, la realidad corrobora que la carrera de Lamine va de forma inmejorable en el Barça y nadie quiere exponer esa inercia: con una valentía nada común, el Barça le ha dado a Lamine toda la cancha posible desde su debut en la primera plantilla con 15 años. Lo ha hecho porque tiene claro que es el nombre clave en el futuro del club, a meses de reabrir el Camp Nou. Esa verdad tampoco escapa a su agente, Jorge Mendes, que ve como la trayectoria de su representado va, con la presión justa, como un cohete en un club en el que, además, tiene más futbolistas bajo su tutela, como Alejandro Balde, Ansu Fati o cedidos por otros clubs, Joao Félix y Joao Cancelo. En resumen, el PSG está por batir su récord, pero el Barça lo tiene claro: “Lamine no se toca”.
