Antes de partir hacia América, Carmela y sus hijos han hecho una pequeña parada en Nápoles para arreglar todo el papeleo para poder cruzar el charco y comenzar una nueva vida legal y sin preocupaciones.
Sin embargo, Carmela y su familia han tenido un terrible contratiempo: ¡María ha enfermado de cólera! La joven se ha puesto muy enferma en casa de Assunta y los médicos han decidido ingresarla de inmediato en el hospital.
Aunque la situación era bastante grave, Carmela mantenía la esperanza de que su hija se recuperase, pero todo anhelo se ha esfumado cuando la granjera ha ido a ver a María a su cama y ha visto que no estaba. “¿Ha muerto?”, ha preguntado a las enfermeras desesperada.
Una mujer le explica a Carmela que han llevado a María junto a la capilla de los moribundos y ella corre desesperada hacia ahí. “Por desgracia, nadie entra y sale de ahí”, le confirma una de las enfermeras. Carmela se agarra con fuerza a unos barrotes y suplica que le dejen ver a su hija por última vez, pero no cumplen sus peticiones. ¿Se marchará la granjera con el resto de sus hijos a América?
