Las empresas de microbuses que operan en el aeropuerto de Palma han decidido paralizar durante esta mañana su actividad, después de que algunos de estos vehículos hayan sido expedientados por los inspectores de Transportes del Govern, lo que ha generado importantes colas en la zona de llegada de los pasajeros. El presidente de la patronal que agrupa a este colectivo (ATVIB), Juan Gorrera, ha responsabilizado de los hechos a Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (AENA), que hasta ahora se ha negado a sacar a licitación un estand desde el que estas empresas puedan comercializar legalmente sus servicios.
El acuerdo alcanzado entre la asociación Taxis-PIMEM y la Asociación de Transportistas de Viajeros de Balears (ATVIB) para evitar conflictos entre ambos grupos había mantenido la paz en Son Sant Joan hasta el día de hoy. Este pacto consistía en separar la actividad de ambos grupos en el exterior de la terminal, pero para dar un carácter legal al mismo se llevaba tiempo solicitando a AENA la adjudicación de un estand a los segundos desde el que poder contratar sus servicios.
Los taxis no han podido absorber toda la demanda / ATVIB
Expedientres sancionadores
El conflicto se ha desatado esta mañana, cuando han acudido algunos inspectores de Transportes y, al no disponer todavía de ese puerto de contratación, han expedientado a varios microbuses, desatando la protesta de todo este colectivo, que se ha negado a seguir dando servicio, según señala su presidente, Juan Gorreta. Hay que tener en cuenta que este sector cuanta con unos 70 vehículos que dan servicio en el aeropuerto.
Ante esta parada, los taxis que estaban en ese momento en el aeropuerto no han tenido capacidad para dar servicio a todos los pasajeros que llegan a la isla con la agilidad sificiente, lo que ha generado largas colas junto a la parada de éstos.
Gorreta ha insistido en dirigir toda la responsabilidad hacia AENA, a la que acusa de no facilitar el que este sector pueda operar dentro de la legalidad.