Lo que lleva varias temporadas siendo un hándicap en invierno (la falta de frío), este año lo será también, pero a la inversa, en verano (la falta de calor). Sin embargo, curiosamente, pocas de las partes implicadas en este baile que son las rebajas tienen malos augurios para la campaña. De cinco fuentes sondeadas por El Periódico, del grupo Prensa Ibérica, las cinco coinciden en que este periodo de descuentos lo caracterizará la variedad del surtido, unas ofertas más que generosas y un consumidor que corresponderá y aprovechará semejante constelación. “Yo, lo que le digo a los míos es que aprovechen este año y que aprovechen, sobre todo, el inicio de temporada, porque habrá mucho producto y mucho descuento”, sintetiza una de ellas.
Lo que hace que esta campaña de verano sea ligeramente diferente a la de los últimos años es el clima. Al haberse alargado tanto la temperatura primaveral, la gente ha dejado para más adelante la compra de ropa de baño o de sandalias, con lo que las tiendas, que hace semanas que tienen expuesto este producto, llegan a la campaña bien cargadas de existencias. En muchos casos, no les quedará otra que venderlas a precio más bajo de lo que querrían, pero, teniendo en cuenta que en general se espera que la llegada del calor coincida con el momento en que las compañías más importantes del sector (Inditex, El Corte Inglés, Mango…) pongan en marcha sus descuentos, es más que previsible que lo que se pierda por precio, se gane por incremento de las ventas.
“Somos un sector que nos pasa como a la cerveza o al helado: nos afecta mucho el clima”, contextualiza el director ejecutivo de Modacc, el Clúster Català de la Moda, David García Uslé. “Cuando empieza el calor en mayo se venden muchas más cervezas que cuando llega a finales de junio, y las que no se han tomado, no se recuperan. En la moda ocurre lo mismo, cuando la climatología no acompaña a la entrada de la temporada, lo que puede suceder es que te cargues de ‘stock’, que es lo que pasará esta vez”, afirma este portavoz sectorial, que reconoce que esto perjudica a la rentabilidad de las marcas, pero beneficia al cliente: “Es un buen momento para equiparse, porque habrá muchas oportunidades”.
La cuestión es que, con calor o sin él, la dinámica que lleva desde hace meses el consumo es buena. Es decir, que comprar, se ha comprado igual. “Los meses de mayo y junio han sido muy buenos, la gente ha comprado [el surtido propio de] primavera y entendemos que las compras de verano se reactivarán ahora”, apunta el delegado en Catalunya de la Asociación Española de Centros Comerciales, Víctor García. “El problema sería que hubiésemos tenido unos meses malos y entonces tuviesen que vender por debajo de precio”, añade este responsable, que asegura que, en cambio, los comentarios que le llegan de los comerciantes es que en general se está muy esperanzado con esta campaña de Rebajas, que se están sumando muchos y que el producto y el descuento serán muy interesantes.
La visión del comercio familiar
Lo ve también así, aunque con cierto punto de resignación, la asociación catalana de la empresa familiar del Retail Comertia. “Tradicionalmente, el sentido de la campaña de Rebajas de verano era hacer liquidación una vez terminaba la temporada –explica su vicepresidenta, Laura García–. Hace años esto empezaba el 1 de agosto, luego por presiones de mercado se estableció el 1 de julio, pero esta fecha se ha ido desdibujando completamente”. Así, a sus ojos, es “un contrasentido” y “una mala jugada” para ellos poner a la venta en oferta ropa de verano a la que no se ha dado apenas recorrido, algo que harán igual porque consideran que no pueden quedarse fuera.
Lo que han ganado, eso sí, es una semana más de margen, pues si bien al principio parecía que aquellos que acaban marcando el inicio extraoficial de la campaña, pondrían en marcha sus descuentos esta semana pasada, finalmente se han acabado alineando para activar las ofertas una vez pasado San Juan. Esto lo interpretan algunas de las fuentes consultadas, precisamente como una forma de estirar algo más la venta de ropa de verano sin descuento y de distanciarse de una festividad que puede hacer a buena parte de su público estar de puente. En cualquier caso, dos de estas compañías consultadas por El Periódico son unánimes en el mensaje: “Esperamos una campaña con descuentos interesantes, fuertes y potentes y tendremos buena oferta”, concluye una de ellas.