El viaje a Alemania de la presidenta de la Comunidad de Madrid coincidiendo con la declaración de su pareja ante el juez por un presunto caso de fraude fiscal es para el Gobierno una “curiosa” coincidencia. La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha cuestionado esta mañana que Isabel Díaz Ayuso “se haya marchado a Alemania” cuando está citada a declarar su pareja “por tres delitos confesos, dos delitos fiscales y uno de falsedad documental”.
El Ejecutivo vuelve a poner el foco en la presidenta madrileña tras su condecoración al presidente de Argentina, Javier Milei, y ahondar en las tensiones internas dentro de su partido por esta decisión. Tras denostar su adhesión a las políticas de Milei porque “despreciar la igualdad de oportunidades es despreciar la sanidad pública, la educación pública o las pensiones”, Alegría ha conminado a Alberto Núñez Feijóo, durante una entrevista en Telecinco, a aclarar si también comparte este modelo. “Sería importante que también se posicionara y nos dijera si está de acuerdo con esa entrega de la medalla y, sobre todo, con el discurso que hemos escuchado este fin de semana”, señaló.
Durante el acto del pasado viernes con el mandatario argentino, Ayuso evitó el choque institucional con el Gobierno en su discurso, pero sí ensalzó sus similitudes con Milei. «No nos conformamos con lo que hay», «hay que imaginar, decidir y actuar» o «evitar arrepentirse de todo lo que no hicimos», se comparó para recordar una vez más que los «proyectos liberticidas», en el que encuadra el de Sánchez, empiezan con el «asalto a los poderes» y «anteponiendo la democracia popular a la ley».
Más allá de la imputación de su pareja, desde el Ejecutivo siguen insistiendo en usar políticamente las muertes en residencias durante la pandemia pese a la falta de avances judiciales sobre los denominados “protocolos de la vergüenza”. Asimismo, señalan que esta es una “mácula que la acompañará siempre”. “La de los 7.291 muertos”, concluyen.
La Fiscalía, sin embargo, no ha mostrado una posición proactiva en los procedimientos que han ido llegando a diferentes órganos judiciales en este territorio, y tampoco ha acompañado a las familias o plataformas de afectados que han apuntado hacia la responsabilidad del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso por la aplicación de los denominados ‘protocolos de la vergüenza’.
Renovación del CGPJ
Al mismo tiempo que el Ejecutivo desliza una falta de liderazgo interno de Feijóo ante los sectores más duros de su formación, se mantienen las negociaciones para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Precisamente, Ayuso ya mostró su oposición a dicho acuerdo si no iba acompañado de un cambio en el modelo de elección de los vocales.
La propia Alegría ha reconocido negociaciones discretas y se ha mostrado positiva sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo antes de que remate esta semana. El presidente del Gobierno dio de plazo hasta el mes de julio para cerrar un pacto o, de lo contrario, activaría una reforma de la ley del poder judicial para quitar al órgano de gobierno de los jueces la competencia de hacer nombramientos en la cúpula judicial. El ultimátum sigue en pie, como ha recordado la portavoz del Ejecutivo: “Esperamos que durante esta semana sea posible [el acuerdo]y si no, como dijimos, el Gobierno y el Parlamento asumirán su responsabilidad”.