Ya hace dos años -el 1 de julio de 2022- desde que ocho sistemas de seguridad pasaron a ser obligatorios en todos los vehículos que se vendían nuevos dentro del territorio de la Unión Europea. Sin embargo, no era necesario instalarlos en los coches comercializados en ese momento, sino que únicamente influía en los vehículos que fuesen homologados a partir de dicha fecha. A pesar de ello, el próximo 1 de julio de 2024, exactamente dos años después, esos ocho sistemas de conducción pasarán a la obligatoriedad en todos los automóviles que de vendan en la UE, independientemente de que hayan sigo homologados anteriormente.

Esta medida que entrará en vigor en tan sólo unos días forma parte del proyecto llamado Visión Cero, que promete reducir al máximo las muertes por accidente de tráfico en las carreteras europeas. De esta manera, los responsables de Bruselas han decidido usar la tecnología como la mayor aliada para minimizar las consecuencias de a conducción temeraria y los distintos tipos de siniestros que pueden darse en las carreteras.


Reducir la conducción para asegurar las cifras

De hecho, el plan a largo plazo no se queda en 2024, sino que para que 2050 la Unión Europea pretende que la cifra se haya reducido tanto que podamos decir que los fallecidos en las carreteras debido a siniestros sean cero. Se calcula que, para el año 2030, la reducción deberá ser ya del 50% respecto a las cifras del 2020. Sin embargo, para el periodo entre 2010 y 2020 también se había planteado un objetivo similar y no se pudo alcanzar esa tan esperada reducción del 50% en una década. Así las cosas, los responsables de Bruselas decidieron llevar al extremo las posibilidades de la tecnología para tratar de rebajar la siniestralidad, de modo que se eviten muchos accidentes que hoy se producen, o que se reduzcan las consecuencias de los mismos.

A continuación, enumeramos los ocho sistemas de seguridad que de manera obligatoria deberán incorporar los coches que se vendan como nuevos a partir del próximo 1 de julio. Estos son: el asistente de velocidad inteligente, el detector de fatiga o somnolencia, el asistente de frenada de emergencia, la cámara de visión posterior con alerta de tráfico cruzado trasero, el aviso de cambio involuntario de carril, la alerta de cinturones no abrochados en todas las plazas del vehículo, la llamada caja negra (EDR) y la preinstalación destinada a un futuro alcoholímetro integrado.

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¿Qué es el sistema EDR?

Entre los ocho, uno de los que más destaca es la llamada ‘caja negra’ o EDR (Event Data Recorder), cuyo funcionamiento está basado en el del dispositivo utilizado en aviación comercial, presentando algunas diferencias con este. La mayor variación recae en que en este, podrá recopilar y almacenar información sobre el vehículo y sus ocupantes en el hipotético caso de accidente en carretera. Además, también permite a las autoridades tener algunos datos fundamentales del vehículo si en algún momento se debe investigar qué ha ocurrido en dicho siniestro. Esto es posible gracias a que este sistema conserva los 30 segundos previos al accidente y los cinco segundos de después de este. Los 15 parámetros que el sistema puede detectar son los siguientes: velocidad del vehículo, régimen de giro del motor, movimientos de la dirección, accionamiento de los pedales, deceleración en el impacto, actuación de los diferentes sistemas de seguridad…

Lo que no puede hacer la ‘caja negra’ es grabar imágenes, sonidos o conversaciones, además de que todo el contenido que se conserve – como es el caso de 30 segundos mencionados- deberá tratarse de forma anónima y mediante una aplicación exclusivamente dedicada a los fines científicos o estadísticos.

Funcionamiento de los sistemas

Sin embargo, tal y como se ha explicado, los nuevos  sistemas obligatorios quizás sean conocidos para quiénes están acostumbrados a renovar su automóvil a menudo, ya que se han ido probando poco a poco en el mercado del motor. Por ello precisamente, la experiencia dicta que su funcionamiento se ha ido mejorando y que en la actualidad estos sistemas tienen una mayor eficacia que los de hace años. Este el caso de, por ejemplo, el recordatorio de uso del cinturón en todas las plazas, que supone un verdadero un avance con respecto la sistemas anteriores. Del mismo modo, destaca también la cámara de visión trasera con alerta de tráfico cruzado, una herramienta pensada para el cualquier momento de la conducción, especialmente el aparcamiento.

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