Los diez mandamientos serán visibles en todas las aulas de los colegios y universidades públicas en Luisiana, primer estado de EEUU en aprobar una ley para ello.
La polémica medida fue firmada este miércoles por el gobernador de Luisiana, el republicano Jeff Landry, tras su aprobación en mayo en el Legislativo, dominado por el Partido Conservador.
No solo basta con que un cartel con Los diez mandamientos sea visible en cada aula, sino que debe tener las siguientes medidas: no menos de 27 por 35 centímetros. La ley además «requiere una versión específica de Los diez mandamientos«, advirtiendo que apartarse de esta «violaría la ley estatal».
El republicano Dodie Horton, quien impulsó el proyecto, defiende que Los diez mandamientos son la «base de todas las leyes en Luisiana», mientras que los demócratas, que votaron en contra, consideran que es inconstitucional.
Otros estados como Texas, Carolina del Sur y Utah ya habían intentado aprobar iniciativas similares sin éxito.
Este tipo de medidas comenzaron después de que un fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos de 2022 en el caso ‘Kennedy contra el Distrito Escolar de Bremerton (WA)’ ofreciera una interpretación más flexible de la orden constitucional que impide la religión patrocinada por el Estado.
El fallo dio la razón a Joe Kennedy, exentrenador de fútbol americano de Bremerton High School, al considerar que el hecho de que pronunciara una oración silenciosa en mitad de la cancha escolar no violaba la Constitución.
La Constitución de Estados Unidos ordena «la separación de la Iglesia y el Estado» al señalar que «el Congreso no hará ninguna ley respecto al establecimiento de una religión, o prohibirá la práctica libre de las mismas».
Organizaciones de derechos civiles como la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), Americanos Unidos por la Separación de la Iglesia y el Estado y el Southern Poverty Law Center ya han anunciado que impugnaran la medida de Luisiana.
Esta norma desafía el fallo ‘Stone contra Graham’, una decisión del Tribunal Supremo de EEUU de 1980 que anuló la exposición de Los diez mandamientos en las aulas en todo el país.