El tercer día de la Eurocopa está fuertemente marcado por el terror que condiciona el desarrollo de la fiesta futbolística. Después de que esta misma mañana la Policía haya abatido a un hombre armado junto a la fan zone de Países Bajos, el escenario del pánico se ha trasladado a Gelsenkirchen, donde Serbia e Inglaterra se enfrentarán a las 21.00 horas.
Una batalla campal en las calles de la ciudad minera ha devuelto la tensión y la violencia a la Eurocopa. Según ha informado Marca, el enfrentamiento se ha producido entre serbios y albaneses, países que comparten una rivalidad política histórica.
Varios aficionados ingleses han sufrido los daños colaterales del suceso, ya que se encontraban en la zona de terrazas que ha sido arrasada por la pelea pese a que no tendrían nada que ver con lo ocurrido.
Tal y como apunta el medio citado, tres ciudadanos serbios han sido detenidos tras la brutal pelea en la que se han empleado botellas, vasos, mesas, sillas y todo el mobiliario disponible.
Los albaneses han sorprendido a los serbios cuando se encontraban bebiendo en la previa de su debut en la Eurocopa con Inglaterra, lo que ha desatado un episodio corto pero intenso y que ha sido sofocado rápidamente por la policía alemana, que ha empleado a unos 50 agentes desplazados en varios furgones para asegurar el área.