Si las elecciones gallegas, catalanas y vascas no fueron suficiente, las europeas vinieron a reformarlo todo a la izquierda del PSOE. La formación hasta ahora liderada por Yolanda Díaz se encuentra en un proceso de cambio tanto en a nivel interno -en Movimiento Sumar, la plataforma en sí misma- como la coalición, esa amalgama de siglas con ideología y principios semejantes que ahora no parece tan unida. Las consecutivas debacles en las urnas, así como la reciente salida de la lideresa y la constitución de una dirección transitoria -con cuatro nombres especialmente cercanos a la gallega- han terminado por abrir un debate sin más remedio entre las fuerzas que componen el paraguas fucsia. Los partidos de Sumar no contemplan romper la coalición pero sí piden cambios para el futuro de esta alianza.


IU insiste en el «frente amplio» de «igual a igual»

Izquierda Unida es de las fuerzas más contundentes sobre el futuro de Sumar, que por ahora no plantean dejar. El coordinador federal del partido, Antonio Maíllo, ha considerado que el modelo organizativo que hasta ahora regía en la coalición está «superado» y que la nueva etapa se basará en una relación de igualdad entre todos los actores. «No vamos a estar los partidos bajo un paraguas de nada«, ha apostillado este viernes en declaraciones a TVE, donde ha subrayado que el proyecto de unidad que impulsó en su momento Díaz tiene sentido, pero que vincular a todas las formaciones bajo el mismo nombre -en la coalición, el grupo parlamentario en el Congreso, la candidatura a las elecciones europeas y al propio partido de la lideresa, en referencia al Movimiento Sumar- ha generado mucha «confusión».

Así, ha pedido «un poquito de sensatez» y «sentido común» ante el «principio político» de que «si la sociedad no entiende ni cómo te organizas difícilmente va a entender qué proyecto político tienes». Maíllo -que ha celebrado que Sumar como partido haya iniciado ese periodo de reflexión «positivo» tras la salida de Díaz y del que espera tengan suerte- ha adelantado que tanto su formación como Compromís y Más Madrid también van a hacer su propio debate interno para extraer conclusiones de cara al futuro tras el varapalo electoral que supuso el 9J. Eso sí, ha dicho que lo harán «sin derrotismos» porque en España hay un gobierno progresista en el que los fucsias ostentan la parte «más audaz».

Vamos a estar en una relación de igualdad y fraternidad

Entre tanto, el dirigente de IU ha dejado caer algunos dardos a Sumar, asegurando que «no se puede construir un espacio si no es con la comodidad de las partes» así como que «hiperliderazgos sin organización por debajo son efímeros». Así, de cara a esta nueva etapa, el líder de IU ha vaticinado que su formación tendrá un papel importante debido a su implantación municipal por todo el país para construir alianzas desde el territorio y caminar hacia un sistema donde se acabe la «decisión vertical» en la toma de decisiones. «Vamos a estar en una relación de igualdad y fraternidad entre todos, en la que Movimiento Sumar va a ser uno más, igual que Más Madrid, IU, los Comunes, Chunta o Més per Mallorca», ha sentenciado.

Preguntados por ElPlural.com al respecto, fuentes de IU rechazan hacer valoraciones concretas sobre las decisiones que toman internamente las otras formaciones, en este caso sobre la nueva cúpula temporal de Movimiento Sumar, «salvo respetarlas y desear que funcionen». Eso sí, recuerdan que esta formación fue de las primeras en abrir el debate sobre que todas las partes tienen que tener el mismo peso en la coalición para que «funcione como un frente amplio, con debate y diálogo entre las formaciones que la componen en igualdad de condiciones», y que es precisamente «del debate y análisis de todas ellas» de donde «deben salir las decisiones acordadas por todos tras un debate serio y pausado». Por ahora aseguran que no hay fecha ni plazo fijado «a corto plazo» para realizar un cónclave de todos los socios de Sumar.

Isaías Lafuente e Isabel Díaz Ayuso


Más Madrid apuesta por lo municipal

Quizá uno de los socios más leales con el partido de Díaz está siendo Más Madrid, que por ahora se han mostrado muy alineados con las posturas seguidistas de la coalición. De hecho, su cara visible Mónica García se pronunció así tras la dimisión de Díaz: «Un paso al lado para dar un paso al frente. Gracias por tu labor y tu valentía. Tenemos la mejor vicepresidenta y ministra de Trabajo para seguir enarbolando las mejores políticas progresistas». Sin embargo, fuentes del partido siguen apostando por continuar con Sumar aunque desde otra perspectiva, la de darle importancia a lo municipal y al arraigo territorial de cada fuerza que lo compone para recomponer este movimiento a la izquierda del PSOE.

Los de García consideran que la experiencia de su formación a niveles más básicos de la política, como es el Ayuntamiento de Madrid o la Asamblea regional, tendría que servir de ejemplo para construir otro modelo bajo el color fucsia, así como para ganar peso en la dirección. Así, abogan por establecer una mesa de diálogo donde todas las partes puedan debatir y definir el rumbo a seguir desde una forma autónoma y horizontal. «Siempre hemos tenido un perfil propio. Las organizaciones con arraigo territorial siempre hemos reivindicado que hemos dado con una fórmula progresista que habla de los problemas de la gente. Tenemos que plantear esa exigencia de la izquierda en términos de políticas públicas, no de planteamientos organizativos de si somos, no somos, tú eres más, o tú eres menos«, ha dicho en declaraciones a ‘El País’.

Eso sí, esta formación también ha querido marcar distancia con los de Díaz. Así lo ha evidenciado tras la dimisión de la lideresa Rita Maestre, quien ha defendido que Sumar «es una organización política distinta» en la que «nosotros ni estamos, ni vamos a estar, ni hemos estado nunca». De hecho, Maestre fue de las más críticas al respecto de los resultados de Sumar en las elecciones europeas, llegando a pedir responsabilidades a la dirección de los fucsias. «Los resultados de esta noche son malos, sin matices. El rumbo: arraigo territorial, confianza en las organizaciones y valentía para avanzar en el gobierno de coalición», dijo entonces en un tuit.

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida. EP


Compromís celebra su distancia con Sumar

En la misma línea se han pronunciado desde Compromís, partido nacionalista que ha logrado un eurodiputado el domingo pasado en las europeas a través de Sumar. Por un lado, han querido marcar distancia con los de Díaz. «Nosotros no formamos parte de Sumar, Compromís es un proyecto autónomo», ha dicho su dirigente Joan Baldoví, sobre las decisiones de la cúpula. Por otro, han ratificado tanto con los resultados electorales como por el lío interno en la formación su decisión de no formar parte de la estructura orgánica de la coalición. Eso sí, desde los valencianistas sacan pecho por los resultados el 9J, -donde han logrado 150.000 votos y un 7,6% del total en la región, lo que es el porcentaje más alto en una autonomía para los fucsias-, ya que entienden que es lo que ha permitido lograr los tres escaños totales.

Algo parecido piensan en la Chunta Aragonesista, que se desligó de la dirección de Sumar aunque sí forman parte de la dirección y que ahora consideran que su base fiel de votantes en la autonomía ha permitido que la caída de los fucsias haya sido menos dura. Sin embargo, no se han pronunciado sobre Sumar. Menos habladores aún están en los comunes, quienes han logrado el segundo asiento de Sumar en el Parlamento europeo con Jaume Asens pese a sacar tan solo 102.000 votos en Cataluña y 812.000 en toda España con el porcentaje de apoyo más bajo desde su fundación. Se desconoce si estarían dispuestos a seguir con la coalición o no, ni en qué términos. Parece que por ahora están manteniendo un perfil bajo con cerrojazo informativo al respecto.

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