Expertos, científicos, historiadores y académicos coinciden en vincular los orígenes de la cultura gallega con los celtas de la Europa Atlántica a través de conexiones evidentes que van más allá de mitos. Es precisamente Galicia y el norte de Portugal el lugar de la Península Ibérica donde los celtas intercambiaron conocimientos y costumbres con las poblaciones autóctonas, lo que derivó en la denominada cultura castrexa que se desarrolló durante la Edad del Hierro. Uno de los rasgos sociales de estos celtas galaicos es su carácter bélico, su orgullo y lealtad, además de su gusto por la música, la comida, la bebida, la fiesta y el mundo mágico y espiritual. Las referencias literarias destacan que los guerreros galaicos eran hábiles en las emboscadas y asaltos a tribus vecinas, aunque tampoco se han encontrado armas que confirmen este carácter guerrero. Lo que sí se conservan son algunas esculturas masculinas de guerreros galaicos, de tamaño casi natural, en posición de parada militar, armados y adornados con joyas que adornaban la entrada a los castros.
En Galicia, se puede observar un ‘Guerrero de Armea’ en el Museo el Arqueológico Provincial de Ourense, y en el castro de Outeiro Lesenho (Boticas, norte de Portugal) han aparecido cuatro estatuas de guerreros galaicos, además de figuras que se conservan en museos como el Museo Nacional de Arqueología de Lisboa y en museos locales como el de Guimaraes, el de Sanfins y en Viana do Castelo.
Todavía existen algunas dudas sobre su origen, aunque se cree que datan de los siglos IV y V a. C. Mantienen un aspecto rígido y severo y portan atributos militares: empuñan una espada corta o puñal triangular, joyas de prestigio como torques y brazaletes, y usan vestimenta corta. Algunas tienen inscripciones latinas que pudieron realizarse con posterioridad por la influencia de los romanos. Tampoco está clara su función, si funeraria, honorífica, de propaganda o poder, aunque sobre todo han sido interpretados como guerreros o dioses.
Este fenómeno de los guerreros en piedra se repite en múltiples regiones europeas, tal y como explican en el Parque Arqueolóxico da Cultura Castrexa, en Ourense, un espacio donde se estudia esta cultura a través de sus asentamientos, los castros. También se organizan visitas guiadas de carácter didáctico y actividades para niños y adultos.
Y en A Coruña, se puede visitar el castro de Elviña de forma gratuita, con rutas organizadas los sábados y domingos a las 12.00 horas. Es necesario reservar de forma previa en el teléfono de los teléfonos 010, 981 184 278, o a través del correo electrónico [email protected].