Trino Grau, alcalde accidental del Ayuntamiento de Callosa de Segura en sustitución de Manuel Martínez Sirvent (PP), que está de baja desde enero, ha presentado su renuncia a esas competencias por «motivos personales».
Grau, primer teniente alcalde y concejal de Hacienda, asumió esa responsabilidad por el periodo de baja iniciado por el primer edil Manuel Martínez Sirvent el 19 de enero pasado «hasta la efectiva reincorporación del alcalde».
Decreto
Pero no ha sido así. Al menos según recoge el decreto dado a conocer este jueves, que firma el propio Manuel Sirvent, sin resolver si se incorpora al cargo.
De la decisión de Grau y el decreto de Martínez Sirvent llama la atención que la decisión del primero se adopte aparentemente al margen de si Martínez Sirvent ha decidido reincorporarse, y que éste en su decreto dando cuenta de la decisión no se pronuncie, a su vez, sobre qué pasa ahora: Si recupera la vara de mando o va a delegar las competencias en otro concejal o concejala de su equipo.
Motivos personales
Grau es el que ha registrado un escrito en la sede electrónica, fechado el miércoles, por el que manifiesta que por «motivos personales» solicita «le sean retiradas las competencias de alcalde».
El equipo de gobierno en minoría de PP-Vox, que ha estrenado recientemente un canal de comunicación con los medios de comunicación, no ha explicado qué consecuencias va a tener esta decisión
El procedimiento habitual si el alcalde fuera a asumir de nuevo el cargo tras acortar su periodo de baja -en este caso por paternidad- sería el de reincorporarse sin necesidad de que hubiera una renuncia voluntaria del alcalde accidental.
Contexto político
La renuncia de Grau se produce en un contexto de la política municipal de parálisis de la gestión porque los grupos de gobierno (siete concejales y concejalas del PP y una edil de Vox) no han podido llegar a acuerdos con el resto de formaciones políticas de la oposición que sí tienen la mayoría en su conjunto: PSOE (5 concejales), UCIN (3 ediles) e Izquierda Unida (un concejal). También con una situación económica complicada en el Ayuntamiento -sin mucho endeudamiento pero sin margen para invertir-.
Órdago fallido
Martínez Sirvent, en su primera aparición en el pleno tras meses de ausencia pidió al PSOE que se sumara al gobierno con concejalías. El PSOE ni tan siquiera respondió y la reacción de los populares tres días después fue expulsar a la formación del órgano ejecutivo de toma de decisiones. La de incluir a los socialistas en junta había sido una de las pocas decisiones logradas por consenso en este primer año de mandato entra ambas formaciones.