Con un lleno completo, en el que la cola de asistentes sobresalía de la entrada al Ateneo de Madrid, José Luis Rodríguez Zapatero ha sido el blanco de todas las miradas y el centro de atención de todos los oídos con motivo de la presentación de su nuevo libro, ‘Crónica de la España que dialoga’ (Editorial Navona).
El encuentro literario que ha tenido lugar en el epicentro de la intelectualidad de la capital ha estado moderado por los periodistas Ana Pastor y Màrius Carol, y el cual ha estado centrado en los entresijos del libro, que van desde anécdotas desconocidas en su etapa en el Palacio de La Moncloa hasta algunas reflexiones que está dejando el ámbito político actual, como son las próximas elecciones de Cataluña o la evolución del conflicto bélico en la Franja de Gaza. “Zapatero es una excepción de muchas cosas, es el que más entrevistas ha dado en medios no considerados afines. Al llegar a La Moncloa, la primera entrevista que concedió fue a Federico Jiménez Losantos”, ha rememorado la presentadora de LaSexta a modo de introducción.
Y es que el expresidente del Gobierno central ha centrado el groso de su libro, y del conjunto de su exposición en el Ateneo, de la esencia que ha marcado su gestión política y el discurso que ha ido siguiendo en los últimos meses: el diálogo como forma de entender y practicar la política. “Un país debe tener memoria y entender la historia es fundamental. Soy un firme defensor del diálogo y la paz, siendo esta siempre un pacto”, ha ensalzado.
La pregunta era obligada. ¿Qué es el poder para Zapatero y cómo se dialoga con él? El ejemplo más acuciante que ha surgido ante esta cuestión se ha referido a una de las primeras decisiones que adoptó el ex jefe del Ejecutivo nada más hacerse con el mando: la retirada de las tropas de Irak. Un eje que también ha servido en el transcurso del encuentro para referenciar otros temas de calado internacional.
Ante tal encrucijada, Zapatero ha desvelado que siempre tuvo “una convicción temporal del poder”: “El poder es una parte de la política, es temporal; la política son las ideas. Lo importante en el poder es contención y convicción”, ha reiterado.
Portada del libro ‘Crónica de la España que dialoga’. EP
La “huella” que dejará el conflicto de Gaza
A raíz de esta postura, y mostrando la misma determinación que en anteriores ocasiones, Zapatero también ha aprovechado este altavoz para volver a pronunciarse acerca del recrudecimiento del conflicto entre Israel y Palestina en la Franja de Gaza.
“Las democracias no pueden traicionar la legalidad internacional, como está pasando en Israel. Estamos asistiendo en Gaza a algo que va a dejar una huella tremenda en las democracias occidentales. Israel tendrá que hacer un juicio autocrítico sobre la gestión de Netanyahu; también en Estados Unidos bajo el mandato de Biden”, ha subrayado. “El reconocimiento del Estado de Palestina será un factor de paz, que espero que sea el anhelo de todos. Espero que el PP lo apoye”, ha declarado posteriormente en declaraciones a los medios de comunicación.
El episodio del fin de ETA
Siendo una de las cuestiones que más marcaron el mandato de Zapatero durante su etapa gubernamental y que, pese a su fin definitivo, continúa estando en boca de ciertos sectores políticos, ETA y sus últimos años ha ocupado buena parte de este encuentro, también formando un capítulo más que relevante de su libro. En este sentido, el expresidente ha señalado, en tono indudable, que el fin de la banda terrorista fue “una clara victoria”.
En estos términos, ha recordado el papel que el rey emérito Juan Carlos I tuvo en esta recta final y, a la vez, cuando el anuncio de su fin estaba inminente, la postura que adoptó el entonces líder de los populares, Mariano Rajoy, en consecuencia. Centrándose en este último punto, Zapatero ha lamentado que voces del PP aún sigan rescatando el comodín de ETA para cargar contra el Gobierno de Sánchez: “Lo más triste es que no pongan otras cosas sobre la mesa desde la oposición”.
“Si hay democracias en la historia es porque ha habido perdón, se ha olvidado el rencor”, ha subrayado.
La amnistía como método de “paz” en Cataluña
Tomando como punto de partida uno de los capítulos del libro que lleva por nombre ‘El 1-O todos nos hicimos daño’, en referencia al referéndum y al ‘procés’ catalán, Zapatero ha hecho también balance de lo que se puede esperar de los próximos resultados de la cita en las urnas del 12 de mayo y, por ende, de la futura entrada en vigor de la Ley de Amnistía como vía resolutiva del conflicto.
“Mi papel es ayudar al Gobierno. La amnistía es paz y muy buena para España, aprecia y respeta la diversidad. La democracia es pactar”, ha señalado, cerrando filas así con la retahíla de decisiones que ha ido adoptando el Ejecutivo de Sánchez en los últimos meses alrededor de esta cuestión tan candente.
Y es que ha remarcado que el conflicto en Cataluña empezó en 2010, “se racionalizó” en 2017 con los indultos a los líderes del ‘procés’ y ha llegado a este punto actual en el que el diálogo y el entendimiento entre ambas partes ha sido -y está siendo- el eje crucial.
En este sentido, Zapatero ha augurado “una larga vida a la legislatura”, independientemente de lo que suceda en las urnas catalanas dentro de un mes.
Sobre crispación y “agresividad” política hacia Sánchez
Y es que el expresidente del Gobierno tampoco ha dejado pasar la oportunidad para hacer balance del presente, de la política acuciante de estos días, centrando así la mirada en la gestión de Pedro Sánchez. Mirando en retrospectiva hacia su propio mandato en comparación con el actual, Zapatero no ha tenido duda de que “la determinación y fortaleza” del actual jefe del Ejecutivo no la ha conocido “en ningún líder”.
“Recibí muchas críticas durante mi gobierno, pero la intensidad, la ira, la agresividad que ha sufrido Sánchez lo ha superado y resistido con creces”, ha ensalzado.
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