El consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves mantener los tipos de interés de la zona euro sin cambios pese a la moderación de la inflación, como esperaba el mercado. El tipo principal, así, seguirá en el 4,5% (el nivel más alto desde mayo de 2001), mientras que la facilidad de depósito (el interés con que remunera el dinero que guarda a los bancos, el más relevante en el actual contexto) se quedará en su máximo histórico del 4%. Con todo, la primera rebaja parece estar cada vez más cerca.