A escasos meses de los Juegos Olímpicos, la agencia antidopaje española (CELAD) ha abordado una profunda y forzada remodelación tras la denuncia de una funcionaria que exponía que se dejó a deportistas españoles sin sancionar pese a haber dado positivo en controles antidopaje, entre otras posibles irregularidades que está investigando la Fiscalía.