Real Madrid y Manchester City regalaron un partido de ida y vuelta más propio de la Premier que de la Champions. Un encuentro con goles (3-3) y alternativas en el marcador, donde empezó mandando el City, remontó el Madrid, se volvieron a adelantar los ingleses y terminó en empate. Un duelo que rompe el pronóstico conservador de Guardiola, que aventuró que los dos especularían, y que deja la resolución de la eliminatoria para la vuelta en el Etihad. Y un choque en el que Rodrygo y Foden cumplieron las expectativas, mientras Haaland, Bellingham y Lunin quedaron señalados.