El merchandising en el fútbol es uno de los grandes atractivos de los aficionados que siempre están atentos a las últimas novedades de su equipo para añadirlas a su colección. Las camisetas suelen ser cada temporada la prenda de vestuario más vendida. Los clubes están aprovechando el tirón de lo retro, que ha vuelto a ponerse de moda, para recuperar equipaciones antiguas que traen a los aficionados buenos recuerdos del pasado.
Hace pocas semanas, el Real Zaragoza sacó a la venta una camiseta histórica que evoca la temporada 92/93 y causó furor entre la afición. A las pocas horas, la gran mayoría de las tallas estaban agotadas tanto en las tiendas físicas como en la página web.
La camiseta se caracteriza por su color azul intenso y el protagonismo de las tres bandas de la marca Adidas en blanco sobre el hombro derecho. Una camiseta que vistieron en su momento jugadores de la talla de Miguel Pardeza, Poyet, Nayim, Moisés García, Belsué o Andreas Brehme, campeón del mundo por Alemania que falleció de un infarto en febrero a los 63 años.
Ayer, el Lleida Esportiu anunciaba a través de las redes sociales que lanzaba una camiseta retro también de Adidas para celebrar el 30 aniversario del último ascenso a Primera División. Resulta que el diseño de la camiseta es idéntico a la del Real Zaragoza cambiando únicamente, el escudo, la publicidad y una inscripción justo debajo de la marca.
El club catalán certificó su último ascenso a la élite del fútbol español en la temporada 92/93 mientras que los zaragocistas juegan la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid. Por lo tanto, esa campaña Real Zaragoza como Lleida Esportiu compartían un diseño de camiseta similar de Adidas que solamente se diferenciaba en el escudo y la publicidad. Se trataba de la primera equipación catalana y la segunda aragonesa.
En la reedición moderna que acaba de salir a la luz, el Lleida Esportiu tampoco llevará en la camiseta la marca que se llevaba en la época -Boya Supermercat- al igual que sucede en la del Real Zaragoza con Caravan Fragancias ocupando el lugar central que en la década de los 90 tenía Pikolin. Además, las rayas blancas se quedan en la zona del hombro sin alcanzar el pecho como en la época.