El Gobierno ha aprobado en el Consejo de Ministros de este martes tres reales decretos para la cesión de competencias al País Vasco. Entre ellos, el traspaso de la gestión del servicio ferroviario de Cercanías a esta autonomía. De esta manera, el Ejecutivo da por cumplido a menos de dos semanas de las elecciones vascas un pacto alcanzado entre el PSOE y el PNV para facilitar la investidura de Pedro Sánchez.
Asimismo, los otros dos reales decretos contemplan la cesión de las competencias en la homologación de títulos y en políticas de integración social. A mediados de marzo, la Comisión Mixta de Transferencias Administración del Estado-Comunidad Autónoma del País Vasco ya acordó estas medidas.
Antes, a finales de febrero, se produjo el acuerdo entre los gobiernos central y autonómico, que trasladaba al plano institucional el pacto entre PSOE y PNV. La culminación de ese acuerdo se produce en medio de una campaña electoral en la que se dirime, precisamente, si el PNV continúa al frente del Gobierno vasco.
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En la referencia del Consejo de Ministros, el Gobierno celebra que el traspaso de la gestión del servicio de Cercanías establece «un nuevo modelo descentralizado de gestión de los servicios de transporte por ferrocarril». El operador seguirá siendo Renfe, pero, al igual que ocurre en Cataluña, con Rodalies, será la comunidad autónoma la que decida horarios, frecuencias y tarifas.
En concreto, se establece el traspaso de la gestión del servicio de las cuatro líneas de Bilbao y de la de San Sebastián. Asimismo, habilita la posibilidad de crear nuevos servicios de cercanías en Álava entre Araia y Ribera Baja, pasando por la capital, por Vitoria, que nunca ha tenido un servicio de esta naturaleza.
La Administración del Estado continuará ostentando las funciones relativas a futuros servicios en la red de ancho estándar europeo y servicios sometidos a obligaciones de servicio público que no son objeto de traspaso. También seguirá en manos del Estado la emisión de licencias, la seguridad operacional sobre la red, el personal ferroviario o la investigación de accidentes.
Por otra parte, se traspasa al País Vasco la competencia en la homologación y declaración de equivalencia de títulos universitarios. Hasta la fecha, la comunidad autónoma sólo podía hacerlo con títulos de enseñanza secundaria o inferiores.
Mientras, en materia de integración social, el País Vasco asumirá funciones como la prestación de apoyo social, psicológico, jurídico y cultural o el asesoramiento sociolaboral.