La eliminación de la Golden Visa o visado de oro que permite el permiso de residencia para extranjeros no residentes que inviertan más de 500.000 euros en una vivienda apunta a una normalización del mercado inmobiliario en viviendas dirigidas a clase media alta y alta. El Gobierno ha anunciado la retirada de la ley aprobada por el Gobierno del PP en el año 2013 para «garantizar que la vivienda sea un derecho y no un mero negocio especulativo», ha dicho el presidente del Gobierno en el anuncio de la medida.
En el sector inmobiliario se ha recibido la noticia con cierta resignación, especialmente por parte de inmobiliarias centradas en la venta de viviendas de precio elevado. En los últimos años se habían realizado operaciones habituales en la zona de Barcelona, especialmente con ciudadanos chinos y rusos, y en el último año iranís y de otros países asiáticos.
En cualquier caso, la medida no afectará apenas al mercado hipotecario ya que la mayoría de compras se hacían sin financiación ajena o de bancos españoles.
Alrededor del 94% de los visados para inversores están vinculados a inversiones inmobiliarias (cerca de 10.000 autorizaciones), y ciudades como Barcelona, Madrid, Málaga, Alicante, Palma de Mallorca y Valencia son las más demandadas para este tipo de operaciones y, además, coinciden en ser las zonas «más tensionadas».
El objetivo es reducir la presión al alza de los precios inmobiliarios, que especialmente en zonas turísticas bloquean el acceso a viviendas a clases medias y bajas. El Gobierno pretende que ningún ciudadano deba destinar más del 30% de sus ingresos para la compra de vivienda.
La conocida como Golden Visa permitía desde 2013 obtener de forma rápida la nacionalidad a los extranjeros que adquirían una vivienda de más de 500.000 euros en España. La medida hacía del mercado español muy atractivo, ya que las viviendas tienen un precio inferior al de otras zonas de Europa. Al tener residencia y la posibilidad de conseguir la nacionalidad española facilitaba mucho las gestiones burocráticas, entrar y salir del país sin restricciones, así como viajar por toda Europa.
Este tipo de visados especiales también se puede conseguir si se ha invertido más de dos millones de euros en deuda pública española o un millón en acciones de empresas españolas o depósitos en bancos nacionales. La restricción del Gobierno a la Golden Vise se circunscribirá solo a la compra de inmuebles.
El impacto de la medida en el mercado inmobiliario es mínimo. El año pasado el Gobierno en respuesta a una pregunta realizada en el Congreso por el diputado Íñigo Errejón aseguró que se habían concedido 4.940 visados a inversores de Golden Visa entre 2013 y 2022. En 2022 se concedieron 136 Golden Visa por compra de vivienda (un 73% menos que el año anterior) y apenas supusieron el 0,14% de todas las operaciones de compraventa firmadas por extranjeros en España en ese ejercicio -que ascendieron a 98.832, según datos de Registradores de España.
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