La principal fuente de energía del cuerpo que proviene de los alimentos que se consumen a diario, es la glucosa; también conocida como azúcar en sangre. La glucosa es esencial para el funcionamiento del organismo, sin embargo, es vital que se mantenga dentro de los niveles saludables.
Los picos de azúcar se refieren a los incrementos súbitos y significativos en los niveles de glucosa en sangre, después de consumir alimentos con alto contenido en carbohidratos. Y es que, a corto plazo, los picos de azúcar pueden provocarnos cansancio y hacer que piquemos más entre horas.
Controlar el azúcar en sangre es fácil y se puede conseguir realizando algunas actividades en el día a día. Seguir una dieta equilibrada, rica en fibra, proteínas y grasas saludables, además de evitar los carbohidratos refinados y procesados, es esencial para lograrlo.
Además de todo esto, hay alimentos que pueden ayudarte a conseguir este objetivo. Entre estos alimentos encontramos un fruto seco delicioso que puedes incorporar a muchos platos, pero, ¿cuál es este milagroso fruto seco?
Originario de Oriente Medio, este fruto seco era muy apreciado tanto en la Antigua Grecia como en el Imperio Romano, donde se consumía sobre todo entre las clases más altas. Actualmente, uno de los principales productos es Estados Unidos. Nos estamos refiriendo al pistacho, que tiene un índice glucémico bajo, de 15.
Este índice glucémico mide la velocidad con la que el alimento aumenta el azúcar en sangre, en una escala del 0 al 100. Un estudio publicado por Nature por el Centro de Nutrición Clínica de Toronto reveló que los alimentos como los pistachos, que tienen un índice glucémico bajo, no provocan picos rápidos en los niveles de azúcar en sangre.
Gracias a esto los pistachos se han convertido en un buen aperitivo tanto para las personas con diabetes como para aquellas que quieren controlar sus niveles de azúcar. Además, comer pistachos reduce el azúcar en sangre en ayunas y la hemoglobina glucosilada en personas con diabetes tipo 2.
