La filtración de datos personales de una docena de diputados, periodistas y políticos británicos ha sacudido de nuevo al Parlamento de Westminster. El diputado conservador William Wragg ha reconocido este viernes haber compartido con un desconocido los números de teléfono de miembros de su partido, así como del Partido Laborista, a través de la ‘app’ de citas Grindr. Un hecho que ha comprometido de nuevo la seguridad del Parlamento en pleno año electoral y que ha obligado a la policía a iniciar una investigación para tratar de aclarar quién está detrás del presunto ataque de ‘phishing’ y cuáles eran sus intenciones.