El destacado líder yihadista del grupo terrorista Hayat Tahrir al Sham (HTS), Abú María al Qahtani, ha muerto este jueves como resultado de la explosión de una bomba en un ataque suicida ocurrido tan solo un mes después de su liberación, y es que HTS llegó a tenerlo detenido durante siete meses por «comunicarse con partes hostiles». El ataque ha tenido lugar en la casa de huéspedes donde se alojaba, en la ciudad de Sarmada, situada en la provincia siria de Idlib, según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres e informante en el país.
Por su parte, SITE Intelligence Group, un organismo especializado en hacer seguimiento de los grupos terroristas, ha indicado que el ataque suicida lo ha llevado a cabo Estado Islámico.
Al Qahtani, una de las figuras más prominentes de HTS, heredera del Frente al Nusra y que otrora fue filial de Al Qaeda en Siria, fue arrestado en agosto tras la detención de una célula del grupo por parte de la coalición internacional liderada por Estados Unidos. «Al Qahtani cometió un error en la gestión de sus comunicaciones, sin tener en cuenta lo delicado de su cargo ni la necesidad de pedir permiso y aclarar el significado de esta comunicación», declaró entonces la organización yihadista tras suspenderle temporalmente del cargo.
Sin embargo, HTS acabó liberando a Al Qahtani tras considerar que no se trataba de un agente hostil. La mencionada organización es el grupo armado más relevante de la provincia de Idlib, que permanece fuera del control de las autoridades sirias. En Idlib operan además diversos grupos armados que cuentan con apoyo de Turquía, que ha desplegado además militares en esta provincia.