Cullera vuelve a ser uno de los destinos favoritos de los turistas en la Semana Santa. A pesar de los temores de los hoteles y la hostelería de que no se cumpliesen las expectativas debido a las malas previsiones meteorológicas, la respuesta de los visitantes fieles a la localidad turística de la Ribera Baixa han hecho que la ocupación en el puente de Semana Santa haya sido mejor incluso que la pasada campaña, eso si, sin grandes diferencias.
Una vez más el turismo del centro de España ha elegido Cullera para poder pasar sus días de descanso de la Semana Santa y cumplir de esta manera con el ritual que año tras año se viene realizando para poder disfrutar del sol y el mar. Ni siquiera las malas previsiones de la climatología han hecho que la gente se quedara en casa. De nuevo, como ya pasó en fallas, se ha visto también a muchos visitantes de Europa, pero con una importante presencia de visitantes procedentes de Latinoamérica.
Este pasado fin de semana ya se pudo comprobar en las terrazas, en especial en las de primera línea del mar, una ocupación más que considerable ya que al coincidir el fin de semana con la presencia de los habituales visitantes de la comarca junto con los llegados del centro de la península, la hostelería ha presentado una ocupación más que notable llegando en algunos momentos a tener que colocar el cartel de completos. Ya el Viernes Santo la ocupación de terrazas era más que considerable en la zona turística.
Superando cifras del 2023
En este primer fin de semana festivo de la Semana Santa, la afluencia de turistas llegados en especial de la Comunidad de Madrid ha sido más que destacable llegando a algunos hoteles a superar cifras del 90 %, colgando durante algunos días de la Semana Santa el cartel de completo. En concreto, el Viernes Santo, sábado y domingo, aunque en líneas generales, la ocupación ha sido buena durante los nueve días que van desde el sábado anterior al Domingo de Ramos hasta el Domingo de Pascua de Resurrección, con una ocupación media que pueda situarse por encima del 84% en los días clave.
A pesar de ello, desde el sector del turismo, ocio y gastronomía se es consciente de que estas Pascuas la ocupación habría sido mayor de no haber sido por las previsiones de climatología adversa, lo que ha hecho que se realizaran algunas anulaciones de reservas, pero incluso así, la gente que ha huido de los temporales del centro de la península ha hecho que esas anulaciones se complementaran con nuevas reservas, lo cual ha hecho que Cullera haya vivido una Semana Santa espectacular en cuanto a la ocupación a pesar de los malos presagios.
Máxima ocupación en los días centrales
La ocupación hotelera más intensa se centró en los días que van del Jueves Santo al Domingo de Resurrección, unas fechas en las que las cifras llegarán a situarse entre el 90 y el 100% de ocupación. Algunos establecimientos hoteleros colgaron el cartel de completo en especial el Viernes y el Sábado Santo. Domingo y lunes, festivo en algunas comunidades, la ocupación disminuyó considerablemente porque muchos de los visitantes decidieron avanzar su regreso debido a las condiciones adversas.
Además la localidad turística de La Ribera Baixa presentó una buena ocupación en cuanto a los apartamentos ya que muchos de los que tienen en Cullera una segunda residencia aprovecharon estos días de descanso laboral, para descansar estos días de la Semana Santa junto a la playa en especial la gente de la comarca así como de Valencia ciudad.
Superando las mejores previsiones
Con estas cifras hablamos de una Semana Santa con una ocupación superior a la de 2022 y 2023 que consolida de nuevo en estas fechas a Cullera como un destino turístico de referencia en el que se superará con un mínimo de tres puntos la ocupación del pasado año en el cual ya se volvió a cifras de los años de prepandemia superando con ello, a pesar de la meteorología adversa anunciada, las mejores previsiones que se tenían para el presente ejercicio.