La prolongación del Domingo de Pascua en estos dias es un hecho. Porque hoy, tercer día de la Octava de Pascua, continuamos viviendo la Noticia de noticias: la Resurrección del Señor. Seguimos escuchando lo que nos dice el Oficio Divino en estas jornadas. ¿Qué has visto María de camino en la mañana? A mi Señor Resucitado, los Ángeles testigos, sudarios y mortaja. Resucitó de veras mi esperanza.
También sigue la Sagrada Escritura. Este es el día en que actuó el Señor, sea nuestra alegría y nuestro gozo. Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Que lo diga la casa de Abrahán, de Isaac y de Jacob. Su misericordia no tiene fin. Escuchad, hay cantos de victoria en las tiendas de los justos. La diestra del Altísimo es poderosa, es excelsa. Yo no he de morir, yo viviré para contar las hazañas del Todopoderoso.
La misericordia de Dios llena la tierra. Desead la paz a Jerusalén. Vivan seguros los que te aman, porque ha sido cancelada tu condena. Este día de la Octava de Pascua se llama también “Martes de la Primera Aparición”.El motivo es el Evangelio de hoy donde San Juan recuerda el Pasaje en el que María Magdalena llora desconsolada en el Sepucro. Los ángeles le preguntan el motivo de sus lágrimas. Ella cuenta que desconoce el paradero del Cuerpo de su Señor.
Entonces se le aparece Cristo Resucitado que le pregunta también por qué llora. María Magdalena cree que es el hortelano y le pide que le diga dónde lo ha escondido. Cuando Él le llama por su nombre, María Magdalena le reconoce y se postra. El Señor le manda anunciarlo a los discípulos y ella lo cumple. Por eso San Pablo dirá que Jesús después de resucitar de entre los muertos se apareció primero a María Magdalena.