Hace poco saltaron las alarmas sobre una posible separación entre Tamara Falcó e Iñigo Onivera. La marquesa de Grión acaba de cumplir 42 años y, como confiesa, está en el momento más dulce de su vida. El balance de su matrimonio con Íñigo Onieva es inmejorable casi siete meses después de su boda, los proyectos profesionales se le acumulan y todo lo que toca se convierte en oro, su nuevo ático -al que se han mudado hace pocos meses- es un sueño cumplido y sus planes de maternidad siguen adelante; aunque, como asegura, sin ningún tipo de presión, porque la etapa que está viviendo es tan maravillosa que no le puede pedir más a la vida.