La Policía Nacional ha desarticulado una red de ciberestafadores que habrían defraudado cerca de 130.000 euros con el envío masivo de mensajes a teléfonos móviles suplantando la identidad de un conocido centro comercial para obtener los datos de las tarjetas de compra y tarjetas bancarias de las víctimas para posteriormente hacer un uso fraudulento de las mismas.