El rey Carlos III del Reino Unido asistirá este domingo con su esposa, la reina Camila, al servicio religioso de Pascua en la iglesia de San Jorge del castillo de Windsor, en su primer acto público desde que se anunciara en febrero su diagnóstico de cáncer.
Aunque el templo está en los terrenos privados de la residencia real, situada a unos 40 kilómetros de Londres, se espera que el monarca sea visto desde la distancia tanto por la prensa como por los empleados de palacio que a menudo se agrupan en los alrededores.
Aforo reducido por salud
La aparición del jefe del Estado, de 75 años, y otros miembros de la familia real está prevista a partir de las 9:45 horas locales (10:45 horas en la península) y la misa tendrá aforo reducido para minimizar los riesgos para el rey, indicó el palacio.
Estarán ausentes los príncipes de Gales, Guillermo y Catalina, y sus tres hijos –Jorge, Carlota y Luis-, que pasan las vacaciones de Semana Santa en familia mientras ella realiza su tratamiento oncológico, que anunció el 22 de marzo.
Carlos III dio a conocer el 5 de febrero su diagnóstico, que se descubrió tras unos análisis posteriores a una operación de próstata, y desde entonces ha estado apartado de los compromisos públicos, si bien mantiene sus labores de despacho.
Fuentes de palacio han indicado que su comparecencia de este domingo pretende aportar confianza sobre su situación, pero no significa que el soberano vaya a retomar de momento sus actos en público.