El juez federal de Florida Robert Scola ha desestimado definitivamente los cargos por presunto blanqueo de capitales que pesaban sobre el diplomático venezolano de origen colombiano Alex Saab, liberado en diciembre tras un acuerdo entre los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela.
Saab estaba acusado en Estados Unidos de estar tras una red de corrupción que involucraba sobreprecios en cajas de alimentos subsidiadas por el Estado venezolano y sortear así las sanciones impuestas por Washington al petróleo de Caracas.
La desestimación se produce tras el indulto otorgado por el presidente estadounidense Joe Biden al empresario para lograr el canje por diez presos estadounidenses que se encontraban en cárceles venezolanas, así como el de presos políticos venezolanos, entre quienes están seis dirigentes sindicales y activistas a los que la justicia venezolana condenó a 16 años de cárcel en agosto de 2023.
Saab regresó a Venezuela, donde fue nombrado en enero presidente del Centro Internacional de Inversión Productiva. El caso de Saab se convirtió en un estandarte del discurso de Venezuela contra Estados Unidos.
Saab fue detenido en junio de 2020 durante una escala en Cabo Verde a pesar de tener pasaporte diplomático y posteriormente extraditado a Estados Unidos. Caracas ha defendido en todo momento que su arresto es ilegal, ya que contaba con inmunidad como «enviado especial» del Gobierno de Maduro.