Las celebraciones de la Semana Santa en Alicante llegarán a su fin este próximo Domingo de Resurrección con la culminación de dos procesiones significativas: la de la Virgen de la Alegría y la del Cristo Resucitado. Estas dos procesiones tienen una peculiaridad única, ya que mientras que la Hermandad de Nuestra Señora de la Alegría está compuesta por miembros de las Hogueras, el Cristo Resucitado es gestionado por la Junta Mayor de Hermandades y Cofradías, abierta a la participación de cualquier persona, independientemente de su afiliación a alguna hermandad o cofradía.
Ambas entidades representan la alegría característica del Domingo de Resurrección, especialmente destacada durante el encuentro en la plaza del Ayuntamiento, donde llueven las aleluyas desde los balcones del edificio consistorial.
Los eventos procesionales se inician con la salida del Cristo Resucitado, que parte de la Concatedral de San Nicolás poco antes de que la Virgen de la Alegría comience su itinerario desde la Basílica.
El momento de salida está marcado por la tradicional «petalá» que se realiza desde la fachada de la Concatedral, una práctica que ha ganado interés y valor en los últimos años, como han destacado desde la Junta Mayor de Hermandades y Cofradías de Alicante.
La procesión del Cristo Resucitado cuenta con la participación de costaleros y nazarenos de diversas hermandades y cofradías, tanto portando el paso como acompañándolo. Este año, el número de inscritos para ser costaleros ha alcanzado un récord, con cerca de noventa personas inscritas, bajo la dirección de Iván Pérez, capataz.
Desde la Concatedral, la procesión avanza por la calle Mayor hasta llegar a la plaza del Ayuntamiento, donde tiene lugar el emblemático encuentro con la Virgen y la lluvia de aleluyas. Se estima que este año se llegarán a lanzar alrededor de medio millón de estas estampas de colores desde los balcones del edificio del Ayuntamiento.
Posteriormente, la procesión del Cristo Resucitado se une a la de la Virgen hasta su regreso a la Concatedral, en un esfuerzo por cohesionar el último día de celebraciones procesionales en la Semana Santa de Alicante.
En cuanto a la salida de la Virgen de la Alegría, esta tiene lugar aproximadamente tres cuartos de hora después que la del Cristo Resucitado, a las 11.30 horas, desde la Basílica de Santa María. Este año, la Virgen presenta varias novedades, incluyendo una nueva diadema, una saya y un manto floral realizado a través de un concurso infantil.
Durante la procesión, la Virgen es escoltada por las damas de honor de la Bellea del Foc, adultas e infantiles, mientras que la presidencia corre a cargo de las propias Belleas del Foc. Juan Miguel García, hermano mayor de Nuestra Señora de la Alegría, destaca que, aunque la procesión irradia alegría, se lleva a cabo con el máximo respeto hacia las imágenes y el significado religioso.
El recorrido de la Virgen incluye un momento destacado al bajar las escaleras que conectan la Basílica con la calle Jorge Juan, antes de entrar en la plaza del Ayuntamiento. Este año, el peso del trono de la Virgen se ha reducido en cerca de 400 kilos, lo que hace el recorrido más llevadero para los costaleros.
Para aquellos que deseen presenciar la procesión, el capataz de la Virgen recomienda ubicarse en la calle Jorge Juan o en la Concatedral al final de la procesión, cerca de las 14 horas, cuando el Cristo y la Virgen concluyen su recorrido.