Ocho y cuarto de la tarde y por la calle La Rúa se escucha el sonido de una Banda de Cornetas y Tambores. Los músicos de la Agrupación Musical San Andrés Apóstol de Astorga recorría la céntrica calle acompañada de varios cofrades de la Vera Cruz hacia la Plaza Mayor. Esta sería la única procesión que saldría ayer en Benavente. La lluvia hizo suspender la subida de los pasos desde la Ermita de la Soledad y la procesión del Jueves Santo.
Algunos cofrades optaron por acudir a la iglesia de San Juan del Mercado ataviados con la túnica morada. En su interior y tras la oración, el párroco se dirigió a los fieles y señaló que «vamos a acompañarnos a través de la música que nos eleva al cielo, a través de las palabras que nos van a acercar el corazón de Dios y con las imágenes que tenemos en nuestra iglesia que nos acompañan en el camino que Jesús va a recorrer, el camino de la Cruz.
El presidente de las Cofradías de la Santa Vera Cruz y el Santo Entierro, José Martínez, confirmaba la suspensión de la procesión y explicaba el acto religioso que se iba a llevar a cabo. «La procesión queda suspendida. Pero es la procesión externa. Nos queda la procesión interna. Vamos a realizar un acto de devoción y acompañamiento a nuestras imágenes.
El acto se completó con un recorrido por la iglesia de seis paradas con el estandarte, la Cruz y la Bandera Mortuoria de la Santa Vera Cruz. En cada parada, una oración, la lectura de un pasaje bíblico y algún poema para cada uno de los pasos que procesionan en Jueves Santo. También, la Banda de Música Maestro Lupi, que ocupó el altar mayor, interpretó un tema. Se procedió después a la Meditación ante la Cruz.
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