La localidad de Cangas del Narcea amaneció ayer con el susto en el cuerpo tras la explosión ocurrida en la empresa Pirotecnia Pablo, en Vallinas, en la cual falleció el trabajador Modesto García, de 41 años. Natural de Bimeda –una parroquia a escasos diez kilómetros de Cangas– y residente en la capital canguesa desde joven, la víctima se encontraba en el interior de una caseta en la que desarrollaba su labores diarias.