Después de años de dolores, de dificultades para quedarse embarazada o de reglas insufribles, te diagnostican una enfermedad que no conoces. Buscas en internet y las primeras páginas te alertan de la infertilidad; las siguientes, de los tratamientos hormonales «que llegan a matar», o del suplicio que te perseguirá toda la vida. Esto es lo que viven las mujeres cuando se les comunica que padecen endometriosis, una enfermedad benigna que afecta a las mujeres durante su vida reproductiva. Ocurre cuando el endometrio se sitúa fuera del útero, y que afecta entre el 10% y el 15% de mujeres en todo el mundo, y que hoy en día aún sigue silenciada.