El pasado 21 de enero, los jugadores del Almería acabaron indignados por las decisiones de Francisco Hernández Maeso en su visita al Santiago Bernabéu (3-2), que acudió hasta tres veces al VAR en la segunda parte para pitar un penalti a favor del Real Madrid, anular un gol a Arribas y validar un gol ilegal de Vinicius. El que más mostró su enfado fue Gonzalo Melero, que habló en los micrófonos en zona mixta y cargó duramente contra lo sucedido: «No se ha podido hacer más desde fuera para meterles en el partido», indicó el centrocampista del Almería.