Israel ha aceptado liberar a entre 700 y 800 prisioneros palestinos a cambio de 40 rehenes como parte de las conversaciones para un alto el fuego de seis semanas en Gaza, según han informado este domingo los medios israelíes. Además, el Gobierno de Benjamín Netanyahu se ha mostrado dispuesto a permitir el regreso de los palestinos desplazados del norte de la Franja de Gaza.
Las negociaciones entre Tel Aviv y Hamás, en las que media Qatar y Egipto, se han intensificado este domingo en busca de una suspensión temporal de la ofensiva de Israel a cambio de la propuesta de liberación de 40 de los 130 rehenes aún en poder de Hamás en Gaza.
La lista de los presos palestinos que ha acordado Israel poner en libertad incluye a centenares que están cumpliendo cadena perpetua por el asesinato de israelíes en ataques terroristas, según informó el periodista Barak Ravid de Walla News en sus redes sociales.
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Hamas también quiere que cientos de miles de palestinos que huyeron de la ciudad de Gaza y áreas circundantes hacia el sur de la Franja durante la primera etapa de la guerra, que ya dura casi seis meses, puedan regresar al norte del enclave.
Aunque Israel inicialmente se negó a hacerlo, ahora se muestra dispuesto a permitir el regreso de algunos desplazados. Según los medios israelíes, la oferta se limitaría a mujeres y niños, para evitar que hombres armados intenten reforzar a aquellos contra los que el ejército israelí aún está luchando en partes de la ciudad de Gaza.
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Hamás habría buscado convertir cualquier acuerdo en un fin del enfrentamiento con la consiguiente retirada de las fuerzas israelíes. Israel, por su parte, ha descartado esto, asegurando que eventualmente reanudaría los esfuerzos para desmantelar la gobernanza y las capacidades militares del movimiento islamista.
Según los medios israelíes, es probable que la respuesta de Hamás a la oferta israelí tarde unos días en llegar debido a la logística para obtener la aprobación de sus líderes en Gaza.
