Un tribunal federal de Jackson (Estados Unidos) ha condenado este jueves a 27 y a 10 años de prisión a los dos últimos exagentes de la Policía del condado de Rankin, en el estado de Mississippi, que quedaban por recibir sus sentencias por torturar a dos ciudadanos afroamericanos a principios de 2023.
El juez de distrito Tom Lee ha impuesto una sentencia de 27 años de prisión contra Brett Morris McAlpin y otra 10 años de cárcel contra Joshua Hartfield, según ha indicado la cadena de televisión estadounidense NBC News. Por su parte, el fiscal general Merrick Garland ha descrito el crimen como una forma de «depravación» y un ataque «atroz» contra ciudadanos «a los que habían jurado proteger».
Previamente, el mismo juez ha condenado a los exagentes Christian Dedmon (40 años de prisión), Hunter Elward (20 años de cárcel), Jeffrey Middleton (17 años y medio de prisión) y Daniel Opdyke (17 años y medio de cárcel), al considerar que los hechos eran «atroces y despreciables».
Los seis expolicías se declararon culpables en agosto de 2023 de los cargos relacionados con haber torturado a dos hombres negros, a los que asaltaron, arrestaron sin causa, detuvieron ilegalmente, golpearon y acusaron falsamente de delitos graves. Además, Elward ha admitido que puso una pistola en la boca de una de las víctimas para asustarla, tras lo que el arma se disparó de forma accidental, causando heridas graves en la boca, garganta y cuello, aunque acabó sobreviviendo.
Los dos detenidos también fueron obligados a desnudarse, a ducharse juntos y a beber líquidos como aceite de cocina, leche o alcohol, todo ello mientras recibían insultos racistas y descargas eléctricas.
Tras ello, los agentes -que se autodenominan ‘The Goon Squad’ (El escuadrón de matones), debido a su disposición a usar fuerza excesiva y no denunciarlo- intentaron ocultar sus acciones mediante una tapadera que incluía armas y drogas, algo que usaron para acusar a las víctimas hasta que uno de los agentes admitió los hechos.