El Gobierno aprieta para conseguir que catalán, gallego y euskera sean admitidos como lenguas oficiales en las instituciones europeas. Un compromiso que adquirió el PSOE con Junts per Catalunya, que permitió desbloquear el arranque de la legislatura y que se plasmó en una carta a l UE del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, formalizando la petición.