Dani Alves ha recurrido al padre de Neymar para pagar la fianza para salir en libertad este miércoles. De esta forma, el brasileño podrá abandonar la prisión de Brians 2, en la que lleva encarcelado desde el pasado 20 de enero de 2023, en cuanto abone el millón de euros y entregue sus dos pasaportes (brasileño y español).

Así lo confirmó el periódico ‘La Vanguardia’Neymar es amigo de Dani Alves desde que coincidieron en su etapa en el Barcelona y será, a través de su padre, quien se encargue de pagar la fianza de un millón de euros, ya que Alves tiene las cuentas congeladas.

El brasileño tiene todos sus biene embargados por un procedimiento judicial abierto con su exmujer que le impiden poder afrontar el pago. Según el diario, ha sido el padre de Neymar quien se ha puesto a su disposición para ayudarle a sufragar los costes.

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Dani Alves ya recurrió a Neymar y su padre para abonar los 150.000 euros que le requirió el juzgado de instrucción para indemnizar a la víctima de la agresión sexual y que sirvió de atenuante para rebajar la condena hasta los cuatro años y medio.

El padre de Neymar fue el encargado de transferir el dinero para ayudar en la defensa de Dani Alves. Ese dinero se utilizó para pagar una multa denominada «indemnización atenuante del daño causado» de 150.000 euros a los tribunales españoles.

Su posible salida

En la mañana de este miércoles 20 de marzo, la Audiencia de Barcelona ha dejado en libertad provisional a Dani Alves bajo una fianza de un millón de euros, mientras se resuelven los recursos a la sentencia que le condenó a cuatro años y medio de cárcel por violar a una joven en una discoteca de la Ciudad Condal.

En caso de verificarse el pago de la fianza, se procederá a la retirada de los dos pasaportes, español y brasileño, y acuerda su prohibición de salir del territorio nacional, y la obligación de comparecencia ante esta Audiencia Provincial semanalmente, así como cuantas veces sea llamado por la Autoridad Judicial.

Asimismo, se impone a Dani Alves la medida de prohibición de aproximación a la persona de la denunciante a una distancia no inferior de 1.000 metros de su domicilio, lugar de trabajo y de cualquier otro lugar frecuentado por la misma, así como de comunicarse con ella por cualquier medio o procedimiento, hasta que recaiga sentencia firme; declarando de oficio las costas.