En muchas ocasiones a pesar de que llevas una dieta perfecta a lo largo de toda la jornada llega la noche y cometes un error de principiante. Tomas una cena excesivamente calórica que te impide dormir y descansar bien y que, encima, suma multitud de calorías que no deberías sumar a tu dieta y que te van a perjudicar en tu objetivo de perder peso.